SURGIR COMO LOS VERDADEROS

Por: SolarA

Nuestra Prioridad Número Uno en el 2010 es convertirnos en los Verdaderos.
Convertirnos en uno de los Verdaderos es nuestro próximo nivel. También es la clave de todos nuestros comportamientos futuros. Esto no significa que antes éramos falsos. Muchos somos gente buena y honesta, pero aún no somos los Verdaderos.
Para convertirnos en los Verdaderos, no tenemos que convertirnos en otra cosa que no sea quienes somos realmente, pero ya no podemos ocultar QUIENES SOMOS. Es la aceptación consciente de QUIENES SOMOS en un nivel más amplio. Cuando nos convertimos en uno de los Verdaderos, llevamos nuestra verdadera esencia a la superficie para que todos la vean. Habitamos completamente en QUIENES SOMOS.
Convertirnos en los Verdaderos es como vestir una prenda exquisita que fue creada especialmente para nosotros hace mucho tiempo, pero que manteníamos guardada en el fondo del armario, sin atrevernos a usarla. Esta prenda está tejida con todas las hebras de nuestro ser, de quienes somos, quienes hemos sido siempre y quienes seremos. Estas hebras contienen todas nuestras experiencias, todo nuestro conocimiento, nuestro pasado – presente – y futuro siendo en el momento presente.
El cambio para convertirnos en los Verdaderos sucede cuando dejamos salir nuestra verdadera esencia para que todos puedan verla. No es una cuestión de si somos dignos o si estamos preparados para ser uno de los Verdaderos; somos dignos y estamos preparados. Es simplemente elegir hacer el cambio en nuestros panel de control interno para dejar salir a la superficie a QUIENES REALMENTE SOMOS.
Este pequeño e insignificante cambio en nuestro interior cambia absolutamente todo. Cambia nuestra manera de pensar; el modo en que caminamos por el mundo; cambia nuestras respuestas; nuestras actitudes hacia las situaciones actuales; cambia la manera de vestirnos; el modo en que hacemos todas las cosas; cambia el modo en que interactuamos con la gente. Una vez que transitemos este cambio, nos sentimos tan bien, y se debe a que nuestro ser interno y externo finalmente concuerdan. Ya no estamos disfrazados. Esto es extremadamente liberador y nos pone en libertad.
Cuando nos volvemos uno de los Verdaderos, nos deshacemos de todo lo que ya no nos sirve. Esto elimina el residuo final de la larga línea de pisadas en la arena que teníamos a nuestras espaldas. Éstas eran el registro de todo lo que hemos experimentado sobre el planeta Tierra hasta este preciso momento --nuestra historia pasada de todas nuestras existencias. De repente, nos vemos rodeados de arena pura y limpia por doquier. Esto nos presenta un lienzo en blanco sobre el cual podemos crear la vida que verdaderamente deseamos.
En determinadas épocas, muchos de nosotros buscábamos redes de seguridad. Estas redes de seguridad ya no se encuentran en el mundo de la dualidad. Cuando nos volvamos uno de los Verdaderos, descubriremos una red de seguridad generalizada aguardándonos en la Realidad Ultra Mayor.
Una vez que nos volvamos uno de los Verdaderos, tendrá lugar un inmenso reequilibrio. Lo que estaba vacío se llenará y lo que estaba demasiado lleno será reducido. Si hemos descuidado nuestro cuerpo físico, veremos que volvemos a tenerlo en cuenta y nos sentiremos más vivos. Si hemos puesta mucha atención a lo físico, seremos arrojados a una Profundidad Cuántica que nos hará quedarnos completamente quietos. Si hemos cargado demasiada responsabilidad, podremos permitirnos dejar algo de ésta. Si hemos estado evitando responsabilidades, recibiremos alguna. Si hemos estado demasiado ocupados al servicio de los demás como para tener una vida personal, recibiremos una vida personal. Si sóolo hemos estado enfocados en nosotros mismos, comenzaremos a servir a otros.
Al ser uno de los Verdaderos, encontraremos formas creativas para nuestro sostén económico. Si todavía dependemos de la dualidad para proveernos, con empleos que sólo hacemos por dinero, entonces éstos podrían desaparecer.
Parte de ser Verdaderos es ser honesto y auténtico en todo momento. Mientras nos abrimos en muchos niveles, también creamos las fronteras necesarias para mantener la resonancia de veracidad a nuestro alrededor. A veces, esto requiere que seamos súper honestos con aquellos que tenemos cerca o salir de situaciones y relaciones que son turbias y tironean nuestra energía.
Los Verdaderos encarnan el AMOR DE CORAZÓN PURO en todo momento. Son fuente de AMOR; éste emana de ellos salpicándolo todo dondequiera que vayan. Tienen una calmada autoridad, siendo poderosos y humildes al mismo tiempo. Los Verdaderos sirven como Pagodas Sagradas, influenciando todo su paisaje y confirmándole a todos con los que se encuentran que Todo está Bien por su mera presencia. Están dando y recibiendo constantemente tesoros ocultos mientras viven en un estado de gratitud permanente. Los Verdaderos no necesitan, se autoabastecen. Emanan una sensación de bienestar, serenidad, seguridad y confianza.
Cuando entremos al nivel de ser Verdaderos, naturalmente reconoceremos a otros Verdaderos, incluso si no los conocemos personalmente o no hemos hablado con ellos. Y ellos nos reconocerán a nosotros.
Cuando alguien que todavía no es uno de los Verdaderos se encuentra con uno de ellos, a menudo piensa que ha tenido un encuentro con un Ángel. Estar en presencia de uno de los Verdaderos ayudará a quien se encuentra con él a sanar su corazón y a lanzarse a ser también uno de los Verdaderos. Cuando estamos alrededor de los Verdaderos, lo único que tenemos que hacer es ser auténticos.
Cuando nos volvemos uno de los Verdaderos, no tenemos que pensar en cómo servir a otros o servir al Uno. Es natural hacerlo así porque es parte de lo que somos. Los Verdaderos ya son tan limpios, claros, honestos y verdaderos, que automáticamente ven lo que es necesario hacer sin ningún esfuerzo.
Los Verdaderos viven en la Realidad Ultra Mayor todo el tiempo. Están en el Punto Central del MOMENTO CORRECTO – LUGAR CORRECTO y viajan por la Vía Rápida.

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